El comité ejecutivo de la Unión Europea de Sordociegos (EDbU) se reunió entre 22 y 25 de abril de 2014 en Zagreb (Croacia) para llevar a cabo la valoración del trabajo realizado a lo largo de este primer año de la nueva junta directiva. Además de determinar los objetivos principales y elaborar un plan de acción que permita a la EDbU dar un paso más en su consolidación como entidad representante de las personas Sordociegas en Europa.
La EDbU tiene como objetivo hacerse más visible a nivel institucional mediante la creación y fortalecimiento de las líneas de colaboración con las diferentes entidades que a nivel europeo tienen relación con la discapacidad y con la Sordoceguera en particular.
Uno de los objetivos más importantes es la sensibilización sobre la Sordoceguera, dando apoyo a todas las entidades miembros en su trabajo en sus respectivos países y facilitando la creación de asociaciones de personas Sordociegas en los países en los que aún no existen.
Asimismo, la lucha por avanzar en materia de legislación relacionada con la vida de las personas Sordociegas será otro de los puntos clave para los próximos años.
Todos los representantes de los distintos países coincidieron en resaltar la necesidad de unión de todas las personas Sordociegas europeas y de sus respectivas asociaciones. La EDbU es la voz de las personas Sordociegas de Europa y así debería quedar claro tanto para las instituciones como para la sociedad en general.
En la reunión estuvieron presentes la presidenta de la EDbU, Sanja Tarczay (Croacia); el vicepresidente, Seppo Jurvanen (Finlandia); el tesorero, Geir Jensen (Noruega); así como el resto de miembros que componen el Comité Ejecutivo: Peter Vanhoutte (Bélgica), Barbara Verna (Italia), Tamás Gangl (Hungría) y Francisco Javier Trigueros (España). No estuvieron presentes en la reunión Julie Rana (Reino Unido) y el secretario general de la EDbU, Sergei Fleytin (Rusia).
De izquierda a derecha: Tamás Gangl (Hungría), Peter Vanhoutte (Bélgica), Sanja Tarczay (Croacia), Seppo Jurvanen (Finlandia), Barbara Verna (Italia), Geir Jensen (Noruega) y Francisco Javier Trigueros (España)